Rumania no es ajena a las dificultades. El 42,5% de los niños y más del 40% del total de la población viven bajo el umbral de la pobreza Durante los últimos 20 años, sucesivos gobiernos han intentado sin éxito tratar la pobreza ofreciendo un apoyo financiero limitado como las transferencias de efectivo. Para Ana Radulescu, trabajadora social, esto es sólo una parte de la solución que por sí mismo no aborda, ni las causas de la pobreza ni los factores multidimensionales asociados con la misma.
Se reconoce que los intentos de los anteriores Gobiernos por aliviar la pobreza han fracasado, el trabajo social está siendo actualmente reconocido como uno de los principales contribuyentes para permitir que la población salga del círculo de la pobreza de una forma sostenible.
Ana Radulescu, líder de la Asociación Nacional de Trabajadores Sociales – ASproAS, (miembro de la FITS en Rumania), dice que los trabajadores sociales están siendo reconocidos, no sólo por sus competencias para ayudar a las personas a acceder a los recursos, sino también a saberlo usar para lograr un verdadero cambio en sus vidas.
Este planteamiento de las causas de la pobreza ha sido respaldado por el Ministro de Trabajo y Protección Social de Rumanía, Dragos Pislaru, economista de formación, quien ha manifestado que “una sociedad no puede progresar económicamente cuando una parte importante del país vive situación de exclusión social. Sin trabajadores sociales y sin sus habilidades, un país no puede progresar en términos de inclusión social. Rumanía sólo puede avanzar cuando se entienda que la inclusión no se logra sólo con dinero. Sino que la inclusión es la estrategia para movilizar a la sociedad y para que se preocupen unos por otros. Además, es esencial para proporcionar en el futuro acceso al mercado laboral y al crecimiento económico”.
El ministro Pislaru está trabajando con Ana Radulescu y con otros trabajadores sociales para implementar una estrategia en todos los departamentos gubernamentales y establecer un enfoque integrado que aborde la vulnerabilidad múltiple de las familias. Esta visión global busca asegurar que los trabajadores sociales estén presentes de forma activa en todos los servicios sociales de la comunidad. Actualmente para implementar esta estrategia se está trabajando y reuniendo a trabajadores sociales expertos para que desarrollen buenas prácticas que empoderen a comunidades e individuos y que ganen así control, confianza y seguridad en sus vidas.
El Secretario General de la FITS, Rory Truell, manifestó durante su visita a Rumania la semana pasada: “Este reconocimiento y visibilidad de los trabajadores sociales servirá de inspiración y motivación para toda la comunidad internacional del trabajo social. Los trabajadores sociales somos consecuentes defensores de que las comunidades seguras y comprometidas con buenas estructuras sociales, son base esencial para un desarrollo económico sostenible. Además, el trabajo que se está llevando actualmente en Rumania será esencial para superar los muchos problemas sociales que han quedado atrás tras décadas de dictadura y de fracasos gubernamentales. Esperamos que otros gobiernos y organismos políticos internacionales sigan de cerca el trabajo dirigido por el Ministro Pislaru, Ana Radulescu y los trabajadores sociales rumanos”.